Cita de: senior wapo en 10 de Diciembre de 2009, 07:58:50 PM
Yo valoro aprender tanto como tú y no intento minimizarlo en absoluto. Piense que he dicho gasto y no desperdicio.
Pero hay que ser consciente de que todo tiene su contrapartida y todo cuesta algo, aunque asumamos el coste gustosamente. Es lo que se llama coste de oportunidad.
Una de las razones (entre otras) por la que no tengo envidia malsana hacia nadie es que siempre me pregunto eso, que le ha costado a esa persona, que sacrificios hace, con qué es incompatible estar (y llegar a) donde está, a que renuncia por dedicarse a conseguir eso en lo que destaca. Fijate que no he dicho que lo sufra ni que se arrepienta ni nada negativo, solo hablo en términos de coste (precio no necesariamente económico).
No le des más relevancia a la elección de la palabra gasto; puedes usar consumo, empleo de tiempo o lo que te apetezca. La cosa está en que no tenemos el don de la ubicuidad. Sin más.
Quien se especialice en un campo no lo va a hacer de la noche a la mañana, y habrá de mantenerse constantemente actualizado, con mayor coste cuanto más especializado. A medida que adquiera responsabilidades (familiares y de otro tipo) ese coste es más relevante y tiendes a estar más desactualizado. Especializarse además de sus ventajas, y de lo mucho que mole aprender, tiene esos inconvenientes.
En todo caso da igual, porque económicamente lo más rentable profesionalmente es que entres como amigote del jefecillo y no como herramienta resuelve problemas (tus habilidades se miran con lupa). Y que asco que da si tienes principios, por cierto.
¿Qué quieres decir exactamente con "Y que asco que da si tienes principios"?
Saludos.